Apoyado en dos ideas vertebradas por la actividad física como herramienta de cambio y formación:
Todo ello con una metodología activa y participativa donde se compruebe el objetivo principal marcado en este proyecto: inculcar los valores de igualdad, solidaridad, cooperación, respeto y amor por la naturaleza.
Palabras clave
Actividades en la naturaleza, educación física, valores, medioambiente, Educación Primaria, proyecto de intervención.
This article deals with an intervention project carried out in a public center of municipality of the Sierra of Aracena in the Natural Park of Huelva. It aims to combine primary education in the use of the Physical Education area in a natural environment, as a means and instrument for the construction of values in our students.
Supported in two vertebral ideas by physical activity as a tool of change and training:
- The real need for all citizens of education in values of solidarity, responsibility…
- And the awareness of respect and love for nature in the attempt to become active agents able to know, value and respect the environment that surrounds them.
All this with an active and participatory methodology that demonstrates the main objective set out in this project: to inculcate the values of equality, solidarity, cooperation, respect and love for nature.
Keywords
Activities in the nature, Physical Education, Values, Environment, Primary Education, Intervention Project.
Pensamos que es necesario inculcar valores en todos los ámbitos de nuestra vida y desde los primeros estadios de la infancia para que se vayan asentando y aprehendiendo en los niños y niñas actuales, futuros hombres y mujeres del mañana.
Este trabajo se lleva a cabo en la Educación Primaria, abarcando los seis cursos que la componen, aunque se puede desarrollar en cualquier curso y asignatura de dicha etapa. La especialidad elegida para ponerlo en práctica es el área de Educación Física.
El área seleccionada se debe a que esta asignatura es idónea para trabajar valores y actitudes sobre la salud, autocontrol, autoestima, empatía, valores universales como por ejemplo: la justicia, libertad, respeto, igualdad, honradez, solidaridad, amistad, responsabilidad… A este respecto traemos aquí la siguiente afirmación: “Ante la alarmante pérdida de valores en la sociedad actual, los centros de Educación Primaria deben recuperar y educar en valores a los alumnos”, (Jiménez, 2009).
Es en Educación Física donde mejor podemos poner todo esto de relieve: el ambiente es idóneo; el profesor o profesora interviene como moderador/a de la actividad que se esté ejecutando en ese momento; cada alumno y alumna puede relacionarse libremente con sus compañeros y compañeras; la propuesta curricular de la Educación Física permite organizar y secuenciar los aprendizajes que tiene que desarrollar el alumnado a lo largo de su paso por el sistema educativo.
Según Mercado (1994: 298) “El ser humano desde sus primero años de nacimiento, posee una conducta innata de experimentación que pone a prueba sus capacidades, actitudes o valores que el mismo conocer o busca conocer”.
Nuestro proyecto se desarrolla en el medio natural trabajando así junto a la motricidad el fomento de actitudes de respeto al medio ambiente mediante.
Es necesario mencionar en esta introducción algunos principios rectores básicos y que sustentan el desarrollo del presente proyecto:
Partiendo de un concepto de aprendizaje individual, autónomo, progresivo y adaptado al medio para hacerlo más significativo y cercano, las actividades tanto individuales como grupales deberán diseñarse para favorecer la armonía personal y colectiva.
Desde el marco normativo hemos extraído para nuestro trabajo la idea de reforzar el compromiso que todos los ciudadanos debemos tener con el medio ambiente y su protección así como los valores que ellos conlleva.
La importancia de preservar la naturaleza nace en la década de los 60 cuando comienzan a surgir diferentes movimientos ecologistas que luchan por velar y conservar el medio ambiente. Se comienza a debatir sobre deforestación, desertización, cambio climático, etc. En 1972 se celebra en Estocolmo la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Humano y luego le siguen otras como la de Río de Janeiro de 1992, Johannesburgo de 2002 y Río de Janeiro Cumbre Río 20 en 2012, entre otras.
En España nace el Instituto para la Conservación de la Naturaleza (ICONA), en las Comunidades Autónomas van creándose Consejerías de Medio Ambiente (en Andalucía en 1994). En 1996 aparece el Ministerio de Medio Ambiente. Todos los organismos estatales y autonómicos nacen con vocación de ser entes de consulta, organización y protección del medio ambiente.
De ahí que se busque un ciudadano responsable con la sociedad y con el entorno que lo rodea, lo que algunos autores como son Sureda (1988), Trillo (1988) y Ruiz (2004) han pasado a denominar, “ecociudadano”.
La Educación Primaria es un buen pilar donde se pueda cimentar todo ello. Y desde la asignatura de Educación Física tenemos a nuestro alcance múltiples herramientas para conseguirlo.
Desde todos los ámbitos se pide que los valores sociales estén en auge y se apliquen en todas las situaciones posibles. También que se respete el medio ambiente para que las futuras generaciones puedan encontrarlo como nosotros lo estamos disfrutando, o mejor si es posible. Debemos poner en práctica lo que se suele denominar “desarrollo sostenible” defendiendo la “biodiversidad”, el consumo responsable, etc.
La adquisición de valores a través de las actividades físicas en el medio natural realmente no ha sido algo olvidado por parte de nuestros legisladores. Ya desde la LOGSE (1992), se señala la educación en valores como el principio rector del sistema educativo. Las leyes posteriores de Educación LOCE (2002), LOE (2006) y LOMCE (2013) abundan en esta misma idea afirmando que la escuela tiene que ser capaz de formar la personalidad moral, cívica, socializadora de los alumnos. Es más, vincula estos tres elementos (valores, actividad física y medio natural) cuando defiende la transversalidad a todos los bloques temáticos de ciertos elementos como las capacidades físicas y coordinativas, los valores sociales e individuales y sociales y la educación medioambiental y para la salud.
Resumen entre las distintas leyes y los valores que aparecen en ellas:
a) Ley Moyano (1875): distingue entre valores religiosos y valores morales.
b) Ley de Enseñanza Primaria (1945): valores dogmáticos, autoritarios e intolerantes, muy relacionados con los valores religiosos y valores patrióticos.
c) LGE y Financiación de la Reforma Educativa (1970): valores igualitarios, liberales, desarrollistas, tecnocráticos, autoritarios, patriotas, religiosos…
d) LODE (1985): distingue entre valores sociales de fomento del trabajo en equipo y cooperación, igualdad, participación, respeto, paz, tolerancia, cooperación, solidaridad, diversidad cultural y lingüística, fomento de la libertad, participación responsable de la vida social y cultural.
e) LOGSE (1990): distinción entre valores individuales y valores sociales:
f) LODE (2002): sigue distinguiendo entre valores individuales y valores sociales:
g) LOE (2006) y LOMCE (2013): continúan con los mismo valores que en las anteriores haciendo hincapié en la calidad, el rendimiento, el esfuerzo y el sentido social.
Es preciso referenciar la educación ambiental dado que en el Proyecto aparece el respeto al medio ambiente como valor de enorme calado a través del cual incluir valores como el respeto, la solidaridad, el compañerismo, etc., en todo el proceso precisamente aprovechando el privilegio que supone el entorno en el que nos movemos.
La educación ambiental no empieza y acaba cuando el alumno o la alumna deja la escuela, sino que se prolonga en todos los ámbitos de la vida y el alumnado debe comprometerse con el respeto del entorno que le rodea.
Para Álvarez (2004) la escuela ha de tener un papel fundamental en la sensibilización del futuro ciudadano; una toma de conciencia con respecto a la manera de entender su relación como persona, como consumidor, con su entorno, con su medio.
El Real Decreto 126/2014, por el que se establece el currículo básico de la Educación Primaria marca unos objetivos generales para la educación ambiental que se resumen en los siguientes:
El programa de intervención educativa tiene validez cualquier centro de cualquier punto de España aunque no debemos olvidar que en cada centro la realidad es única, pues ni todos los alumnos son iguales ni las características socioeconómicas de cada población es la misma.
El centro donde ponemos en marcha nuestro proyecto de intervención tiene la peculiaridad que se encuentra en un pueblo situado en la Sierra de Aracena en Huelva, un gran Parque Natural que nos posibilita hacer algunas actividades en la naturaleza. En él se imparten los niveles de enseñanza de educación infantil y primaria. Consta de 2 líneas.
El alumnado tiene unas edades entre los 6 y los 12 años y de acuerdo con Piaget, la etapa de estos años coincide con el periodo de operaciones concretas. El pensamiento evoluciona hacia la coherencia y la estabilidad, antes era intuitivo y ahora se hace lógico. Estamos ante una etapa importante de desarrollo intelectual.
En cuanto a los aspectos motrices se refiere la psicomotricidad tiene que ver con las implicaciones psicológicas del movimiento y la actividad corporal, con la relación entre el organismo humano y el medio en el que se desenvuelve. El mundo de la psicomotricidad, es el de las relaciones psiquismo-movimiento y movimiento-psiquismo.
La Educación Primaria se encuentra en la fase que Vayer (1972) denomina periodo de transición. El desarrollo corporal del niño pasa del estadio global y sincrético al de la diferenciación y análisis, cuyas características serían: crecimiento corporal continuo, evolución del autoconcepto, autoestima, autocontrol, desarrollo de la personalidad, relación con los iguales, interacciones, juegos, conductas agresivas, relación de amistad.
Rousseau (1778) destaca que hay que educar en la naturaleza. En su obra Emilio, dice que los niños deben realizar gimnasia al aire libre. Otros pedagogos del siglo XVIII y XIX hablan de educación y ejercicio físico en el medio natural.
4.1. Objetivo fundamental del proyecto
El objetivo fundamental es el siguiente:
Fomentar los valores de: solidaridad, igualdad, amor a la naturaleza, cooperación y respeto a través de las actividades físicas en el medio natural en la etapa de Educación Primaria.
A partir de este, podemos añadir objetivos secundarios tales como:
Los objetivo generales están impuestos por el currículo para Educación Primaria en Educación Física y algunos de carácter general de Educación Ambiental. Del mismo modo, atendemos a los específicos que son aquellos que queremos conseguir con el desarrollo de nuestras actividades.
Enlazando los objetivos de área con los de la etapa y con los de la Educación Ambiental, nuestros objetivos totales a alcanzar son:
1. Conocer, experimentar y valorar las actividades en el medio natural conociendo y apreciando el propio cuerpo adoptando hábitos de salud y bienestar, valorando las repercusiones sobre la salud y la calidad de vida y fomentar la sostenibilidad como medio para alcanzar una vida saludable.
2. Actuar con autonomía en las actividades habituales estableciendo relaciones afectivas, evaluando las prácticas de diferentes actividades desarrolladas en el entorno natural apoyando la protección del medio desde la perspectiva de equidad y solidaridad.
3. Conocer y apreciar los elementos del patrimonio natural de Andalucía y contribuir a su conservación y mejora, desarrollando estrategias de trabajo colaborativo entre el alumnado de manera grupal.
4. Incrementar la capacidad autónoma del alumnado ante cualquier contexto aplicando la propuesta de intervención para abordar la educación en valores en una clase de Educación Física y reflexionar ante cualquier posibilidad que nos ofrece la escuela utilizando una actitud crítica ante todas las informaciones que se nos muestren.
5. Conocer la normativa básica legal y responsabilidad en el desarrollo de las actividades físicas en el medio natural, formando al alumnado en valores, incrementando la actuación autónoma ante la diversidad y analizando conflictos socioambientales.
El proyecto se trabaja el curso completo con la Unidades Didácticas trimestrales. Según establece el Real Decreto de ordenación de primaria el curso académico comprende un total de 175 días lectivos. En cada curso de primaria las clases que corresponden a Educación Física semanalmente es de 1,5 horas, por lo tanto tenemos 8 sesiones al mes por cada curso para llevar a cabo nuestro proyecto de intervención. Tenemos un total de 24 sesiones por trimestre y 72 anuales con cada curso.
Los contenidos son los dicta el currículo para los seis cursos de primaria en la asignatura de Educación Física. Con la LOMCE pasan a llamarse “saberes”: saber hacer, saber ser y saber estar:
1. Todo lo que concierten al conocimiento de nuestro propio cuerpo.
2. Relaciones espaciales y temporales.
3. Habilidades motrices de saltar, correr…
4. Actividades físicas artístico-expresivas.
5. Actividad física y salud.
6. Juegos y actividades deportivas.
Estos contenidos tienden a alcanzar las capacidades, que según el artículo 13 de la LOGSE señala:
a) Apreciar los valores básicos que rigen la vida y la convivencia humana.
b) Utilizar los diferentes medios de representación y expresión artística.
c) Valorar la higiene y salid de su propio cuerpo, así como la conservación de la naturaleza y el medio ambiente.
d) Utilizar la educación física y el deporte para favorecer el desarrollo personal.
Los contenidos que debemos transmitir a nuestro alumnado van en relación con los objetivos y capacidades que queremos que alcancen conseguidos por medio de actividades que aúnen tanto la actividad física con los valores que intentan alcanzar.
Anglada (2012) afirma que “durante todo el siglo XX ha aumentado la utilización del medio natural para la educación. En la última década hemos asistido a una explosión de actividades deportivas en la naturaleza”. “Por ello, el sistema educativo recoge este marco, como un instrumento que facilita al educador la consecución de sus objetivos”.
Con el acto lúdico tenemos un recurso muy valioso en la enseñanza. Los juegos cooperativos frente a juegos individuales. Los juegos en grupo suelen ser más motivadores para los alumnos. Los juegos de campo se caracterizan por tener actividad física y valor educativo, favorecer las relaciones entre los escolares y ayudar a que cada chico y cada chica se conozcan a sí mismo, con las limitaciones, las virtudes o habilidades que posea en cada momento concreto. Además hay que procurar que los juegos no sean discriminatorios, que sean igualitarios y no separe a chicos de chicas.
En nuestro proyecto tomamos como referencia el Modelo taxonómico de Acuña (1991) cuando diseñamos nuestras UDIS (prácticamente están casi todas incluidas) porque tiene una visión amplia de las actividades en el medio ambiente natural, destacando la gran riqueza de sensaciones como principal característica y persiguiendo el desarrollo integral del individuo.
a) Actividades promocionales: entrañan una alta participación y/o asistencia.
b) Actividades libres: entrañan un uso de los recursos naturales y artificiales próximos, facilitando espacios, medios naturales y conocimiento para su desarrollo.
La metodología será siempre activa, en la que el profesorado propondrá las distintas actividades a desarrollar que estarán en consonancia con los contenidos y objetivos que queremos que nuestro alumnado alcance pero, el profesor será un mediador y actuará de guía. El alumno o la alumna son los principales protagonistas de su aprendizaje.
Cada unidad didáctica se inicia en clase con las explicaciones del profesor o profesora, a continuación se enumeraran los contenidos y se pondrán en práctica una serie de actividades que serán graduales al nivel en el que estemos actuando. Al ser clases de educación física la práctica y las actividades físicas deben primar sobre la teoría. Las clases, con una duración de 45 minutos y son eminentemente prácticas. Tan sólo dedicamos los primeros diez minutos a los contenidos y el resto a ponerlos en práctica.
Trimestralmente se programan las actividades (graduadas a cada curso) de dificultad variada, para así atender a las motivaciones e intereses de todo nuestro alumnado. También tenemos en cuenta la atención a la diversidad que tenemos en el aula. Como el programa es de intervención educativa y se desarrolla en el medio natural, realizamos salidas en el entorno cercano.
Por parte del profesorado debemos siempre evaluar todas las actividades para ver cómo se han desarrollado, qué es necesario mejorar y cómo lo haremos para la próxima vez que decidamos poner en práctica tal actividad. Se realizan diferentes evaluaciones a lo largo del curso con el propósito de que nos sirva de retroalimentación sobre la marcha del mismo.
Los distintos procesos que nos permiten saber en qué momento estamos con nuestro alumnado, cómo llevan el aprendizaje los alumnos, qué necesitan mejorar, y en definitiva no da debida cuenta de cómo tenemos que ir actuando en cada momento con nuestros alumnos y alumnas, son fundamentales.
Las técnicas de evaluación utilizadas son la observación directa y otros instrumentos de medición de actitudes.
Se distinguen fundamentalmente tres procesos:
a) Evaluación inicial.
b) Evaluación continua.
c) Evaluación sumativa final.
Con la intervención realizada en el Centro con el alumnado, observamos que los chicos y chicas tenían ya ciertos valores adquiridos de forma innata desde casa.
Con la aplicación de las actividades, pudimos comprobar que cuando se tratan de realizarlas fuera del Centro, se muestran más interesados para participar en ellas, colaboran más y con más entusiasmo.
Para las actividades de la obtención del compost y la de reforestar incluso los padres colaboraron muy amablemente, pues tienen conciencia de que es algo muy beneficioso para el entorno que les rodea. Quieren ser partícipes de la mejora del mismo.
Nos encontramos en el marco teórico gran cantidad de autores que tratan las actividades físicas en la naturaleza y aconsejan su beneficio en cuanto a la salud general del que la realiza. Una de las dificultades encontradas fue la de la duración de las sesiones, pues cada clase ocupa sólo 45 minutos y por ello, tuvimos que pedir a otros profesores que nos acompañaran e hicimos actividades multidisciplinares en colaboración con los mismos.
Los valores de participación, solidaridad, respeto tanto a los demás compañeros, como al medio ambiente, la igualdad de género, colaboración…estuvieron muy arraigados en nuestro alumnado. Aparecían y se plasmaban en cada una de las actividades que realizábamos.
Había algunos profesores y profesoras reticentes a salir del Centro escolar, pues prefieren hacer su clase dentro del Colegio. Había otros que se prestaban incluso voluntarios son tener que solicitárselo, puede desde el área de Ciencias Naturales estaban siempre dispuestos a colaborar con nosotros.
Desde las áreas de Educación Artística y la de Lengua Castellana participaron en la producción de cuentos y murales en la actividad.
Teníamos a nuestro favor, el poder salir al campo cuando queríamos, pues estaba a tan sólo 30 minutos andando y no se precisaba utilizar medio de transporte alguno. Los padres firmaban la autorización de sus hijos e hijas y todo transcurría con normalidad. Existen muchos senderos bien señalizados y adecuados para que el alumnado pueda recorrerlos tranquilamente.
Lo que se percibe es la necesidad de que todo el profesorado de Educación Física ponga en marcha las salidas al medio natural y lleve a cabo actividades para su alumnado.
Tras la realización de la puesta en práctica del proyecto, observamos que de todos los valores citados, en el proyecto de intervención solo nos hemos fijado en 5: solidaridad, igualdad, cooperación, respeto y amor por la naturaleza; pero podría ampliarse a otros como la autoestima, la lealtad, la gratuidad, etcétera.
Por otro lado, no hemos centrado en la Educación Primaria, pero esta labor y este trabajo es abarcable y, así debería ser, para el resto de etapas, e incluso prolongarlo a cualquier etapa de la vida.
Por último, el proyecto se ha centrado en un entorno rural en el que resulta más factible y viable las salidas al medio natural por su gran proximidad, pero también puede hacerse extensible a centros urbanos, de manera que aquel profesor que no pueda salir al entorno natural, pueda hacerlo a algún parque urbano o zona verde de la ciudad.
Conclusiones
Tras la intervención educativa llevada a cabo se corrobora nuestra hipótesis formulada como fundamental del proyecto puesto que mediante la actividad física en el medio natural es constatable que los discentes de primaria adquieren paulatinamente valores tales como: cooperación, solidaridad, igualdad, respeto y amor por la naturaleza.
Paradójicamente el reto que supone trabajar para lograr este objetivo, ha sido mucho más factible y motivador para los alumnos e incluso para el profesorado, que lo que apriorísticamente pensábamos tendría más dificultad.
Sí hemos observado que en la mayoría de ocasiones las actividades daban mucho más juego en cuanto a la variedad de valores que se podían trabajar de lo que en principio imaginábamos. Esto ha supuesto una grata sorpresa por la riqueza encontradas en las mismas. Si bien esto es cierto no podemos concluir sin hacer hincapié en la importancia que tiene para la puesta en práctica la estudiada programación y selección de actividades. Ninguna actividad debe improvisarse, todas deben responder de forma muy meticulosa a los objetivos marcados.
Imagen 1. Valores interrelacionados entre Educación Primaria, actividad física y medio natural
El hecho de poder realizar fuera del centro lo que otros colegios tienen que hacer siempre dentro, debido a la falta de espacios naturales que puedan visitar, es algo que enriquece nuestro aprendizaje.
Podemos ejercitar la motricidad en todos sus ámbitos en pleno entorno natural, haciendo mucho más motivador y agradable la recepción por parte de todo nuestro alumnado.
Son muchas las ventajas que tenemos, si bien también surgen algunos inconvenientes desde el punto de vista organizativo, pues salir del centro siempre supone tramitar autorizaciones de los padres para que den su consentimiento a que su hijo pueda salir al entorno natural. La ventaja que tenemos es que estamos en pleno corazón de un parque natural y podemos ir a pie a cualquier enclave del mismo, sin necesidad de utilizar vehículos ni medio de transporte alguno. Al estar los accesos acondicionados, no se aprecian a priori peligro al realizar la salida.
Además el medio ambiente es un lugar de interacción. Junto al desarrollo de la sesión práctica, estamos al aire libre, respirando aire puro y sin contaminación, por lo que este entorno posibilita que el alumnado se divierta, descanse de los ruidos de la ciudad, y tenga una percepción de tranquilidad y paz interior, lo que se traduce en salud mental y salud física.
También hay mayor refuerzo de contacto con la naturaleza, las actividades que se hacen de forma grupal. Los paseos y excursiones suelen tener mucha aceptación y si lo hacemos en un entorno natural protegido, como es nuestro caso, los valores de respeto y protección al medio ambiente se acrecienta entre nuestro alumnado.
Otras actividades como escalada, trepa de árboles, camping, etc. no se pudieron hacer por el riesgo, falta de equipación o la dificultad que entrañaban. Nuestra etapa de primaria debe de ser introductoria, para que en secundaria se sigan haciendo tales actividades.
Aún queda mucho por hacer, pues la práctica de las actividades físicas en el medio ambiente en la Educación Primaria es escasa. Por un lado porque suelen presentarse algunos problemas para organizarlas, y por otro porque muchos profesores temen salir con sus alumnos y alumnas fuera del centro escolar y prefieren realizar las actividades dentro, en el campo del colegio. También las sesiones son de tan sólo 45 minutos, por lo que al hacer las salidas suele consumirse más tiempo, de ahí que muchas veces se necesite la participación de otros profesores y profesoras para que presten su clase a la nuestra o bien se integren con nosotros y hagamos una actividad multidisciplinar.
Un gran número de trabajos han indicado que actividades en la naturaleza pueden ser útiles en la obtención de habilidades de resolución de problemas. (Anglada, 2012).
A continuación, realizaremos una serie de recomendaciones para la adquisición de valores a través de las actividades físicas en el medio natural:
1. Vemos viable que en todos los centros se realicen al menos alguna actividad en contacto con el medio ambiente por mes. En colegios rurales es más asequible y fácil, pero en los urbanos pueden hacerlo en un parque o algún paraje próximo al centro.
2. Constatamos que es mejor efectuar las actividades en conexión con algún grupo más, ya sea de educación física o de otra área para realizar alguna actividad multidisciplinar.
3. Debemos hacer una sesión pre-salida al campo en la que comentemos a nuestro alumnado los contenidos que queremos tratar y los objetivos deseables tras la realización de la sesión que llevaremos a cabo en el entorno natural.
4. Para aquellas sesiones que preveamos que pueden necesitar más tiempo para su ejecución práctica, las sintetizaremos y trataremos de poder coger alguna hora lectiva más, para ello haremos uso de algún profesor o profesora de otra asignatura y si fuese posible que nos acompañe también al campo y así podemos trabajar conjuntamente los valores desde varias perspectivas.
5. Llevar las actividades ya diseñadas desde antes de salir al enclave natural, así dejamos menos espacio a la improvisación. Pero, a veces si la actividad es de sumo interés para el alumnado podemos prorrogarla un poco más, si se nos permite.
6. Cualquier actividad en el medio natural enriquece las relaciones interpersonales de nuestros alumnos y los valores de esfuerzo, cooperación, trabajo en equipo, superación, son asimilados muy bien por estos.
7. Recomendamos que siempre que sea posible se realicen cuantas más actividades y salidas en el medio que sea posible se realicen cuantas más actividades y salidas en el medio que nos rodea, pues aparte de trabajar los contenidos curriculares, adquirimos valores que nos hace ser mejores personas.